Lo bueno, lo malo y lo feo de la presentación del Caracas FC ante Paranaense
El equipo dirigido por Noel Sanvicente regresó a su casa, el estadio Olímpico de la UCV, para disputar los octavos de final de la Copa Sudamericana
MANUEL ALEJANDRO RAMÍREZ | @manuramirez95
Desfavorable y poco categórica. Así se podría
catalogar la presentación del Caracas FC, que cayó en la noche de este
miércoles con marcador de 0-2 ante Atlético Paranaense, de Brasil, por la ida
de los octavos de final de la Copa Sudamericana.
El 11 veces campeón de Venezuela afrontará el
partido de vuelta con más dudas que certezas, puesto que la eliminatoria quedó
cuesta arriba y la faceta de juego no fue la más esperada. A continuación, lo
bueno, lo malo y lo feo que mostró el equipo ante la institución brasileña:
Lo bueno
318 días transcurrieron para que el Caracas volviera
a jugar en su casa, el estadio Olímpico de la UCV, con una noche de copa internacional, luego de que la Conmebol diera el
visto bueno a los trabajos de reparación que se efectuaron en el recinto
durante ocho meses.
Con el terreno de juego en óptimas
condiciones, más de 12.490 espectadores disfrutaron del compromiso en el
“Coloso de los Chaguaramos”.
Los comandados por Noel “Chita”
Sanvicente gozaron de orden táctico en la zona medular durante los primeros
pasajes del encuentro, pero les faltó atrevimiento para encarar el área y
puntería para inaugurar la pizarra.
Más allá de que el combinado
capitalino fue superado en el resultado final, la fanaticada avileña no dejó de
cantar y alentar durante el espectáculo hasta el pitazo final.
Lo malo
“Tenemos que sacar nuestra
jerarquía”, expresó, previo al partido, Rubert Quijada a una radio local. “La clave será
estar ordenados, ser inteligentes y saber aprovechar los espacios. Quitarles la
pelota y saber defendernos con ella”, indicó Robert Garcés, en declaraciones al
departamento de prensa del club. Ninguna de las dos consideraciones se cumplió.
Con el correr de los minutos, la
idea del Caracas perdió brillo en cuanto al dominio del esférico, hecho que
aprovechó el Paranaense para tomar protagonismo. A tres minutos de irse al
descanso, el “Huracán de Curitiba” se puso en ventaja con un tanto de Raphael
Veiga.
Ante la desventaja, Sanvicente no
se quedó de brazos cruzados y le dio ingreso a Daniel Saggiomo por Diomar Díaz,
al minuto 59, y posteriormente sacó al uruguayo Facundo Moreira, al 62, en
lugar de Garcés.
No obstante, los cambios no
causaron efecto. Néstor Canelón era el más movedizo y participativo por los
costados, mientras que el colombiano Jesús Arrieta se veía en la obligación de
salir de su hábitat natural, el área, y así combinarse con sus compañeros.
Lo feo
Los locales, que jugaron con el
uniforme alternativo por decisión de la Conmebol, no terminaron de conseguir el
camino para penetrar el área rival y causar peligro en la valla custodiada
Santos.
Una pérdida del balón en situación
de ataque dejó mal parados a los “Rojos del Ávila” en el fondo y Veiga selló su
doblete en un contragolpe, para dejar cifras definitivas a los 73 minutos.
La falta de contundencia pasó
factura. Los dirigidos por “Chita” extrañaron a un cazador de goles como Edwuin
Pernía, quien fichó por Deportes Iquique a finales de julio, o Fernando
Aristeguieta, quien se marchó al América de Cali en ese mismo período.
Ahora, con la eliminatoria
prácticamente sentenciada, el Caracas se volverá a ver las caras con el
Atlético Paranaense, el próximo 3 de octubre, en el Arena da Baixada.
No solo el resultado está en
contra, también los pronósticos, puesto que ningún equipo venezolano ha
inscrito su nombre en los cuartos de final de la Copa Sudamericana.