La historia de Venezuela en las Olimpiadas


Dos medallas de oro, dos de plata y ocho de bronce son los logros que ostenta de manera oficial la nación a lo largo del certamen deportivo más significativo del mundo

MANUEL ALEJANDRO RAMÍREZ | @manuramirez95

Venezuela ha dicho presente en 16 Juegos Olímpicos de verano, en los que ha conseguido un total de 12 preseas oficiales y dos de exhibición; además, ha participado en cuatro Juegos de invierno y seis paralímpicos.

La historia de la nación comenzó hace 68 años. El ciclista Julio César León fue el primer “paisano” que acudió al evento multidisciplinario, donde finalizó de cuarto en los Juegos de Londres 1948.

En Helsinki 1952, Asnoldo Devonish conquistó el primer podio olímpico en la historia deportiva para la nación; fue una presea de bronce en salto triple, con un registro de 15.52 metros.

Ocho años después, el tirador Enrico Forcella, en la modalidad rifle en posición tendido a 50 metros, le dio el segundo bronce a la delegación tricolor en Roma 1960, al sumar  587 puntos.

Puños memorables

En México 1968, el boxeador Francisco “Morochito” Rodríguez  se bañó de gloria y significó el primer oro para Venezuela, luego de derrotar al surcoreano Joun Ju Jee en el peso mosca ligero.

Pedro Gamarro, conocido como “El Tren de Machiques”,  obtuvo la primera medalla de plata criolla en Montreal 1976, tras caer en la final de la categoría welter ante el púgil de Alemania Oriental Jochen Bachfeld.

En Moscú 1980, otro boxeador autóctono ganó la distinción plateada: Bernardo Piñango, quien contaba con poco favoritismo, perdió la final de peso gallo frente  al cubano Juan Hernández (5-0).

Tres joyas en una edición

En Los Ángeles 1984, Marcelono Bolívar, en la división mosca ligero, Omar Catarí, en la categoría pluma, y el nadador Rafael Vidal, quien logró 57 segundos y 51 centésimas en los 300 metros mariposas, representaron la mayor cantidad de galardones para el país. Las tres conquistas fueron de bronce.

Cuatro Juegos sin nada

La sequía de títulos para el combinado patrio, al menos de forma oficial, se produjeron en cuatro Juegos consecutivos: Seúl 1988, Barcelona 1992, Atlanta 1996 y Sydney 2000 dejaron el historial vacío hasta Atenas 2004.

Israel Rubio, en halterofilia de 62 kilos, fue el primer oriundo en ganar una chapa olímpica para la nación después de dos décadas. Adriana Carmona, con su plata en taekwondo, fue la segunda medallista criolla en Atenas.

Previamente, Carmona y Arlindo Gouveia habían obtenido bronce y oro respectivamente en dicha especialidad en Barcelona; sin embargo, para esa época el deporte era de exhibición, entretanto, las hazañas no se consideraron como oficiales.

Vale destacar que Venezuela fue por primera vez a un cita paralímpica en 1992 con ocho intérpretes. Allí se ganó una distinción de bronce. Por otro lado, Iginia Boccalandro, en descenso de trineo, fue la primera nativa que participó en un certamen invernal, en Nagano 1998.

Otro logro en taekwondo

Beijing 2008 fue memorable. 108 deportistas criollos significaron la mayor delegación de la historia, donde Dalia Contreras se apoderó de la medalla de bronce, tras vencer a la keniana Mildred Alango (1-0) en la categoría de 48 kilogramos.

En aquellos juegos de Pekín, Venezuela fue el único participante en duplicar la cantidad de atletas clasificados con relación a las ediciones anteriores, solo por detrás de China, el anfitrión, que estuvo representada con 600.

Asimismo, la delegación se metió por vez primera en tres deportes por equipo, en softbol femenil y voleibol tanto masculino como femenino. Solo en Moscú (fútbol) y Barcelona (baloncesto) había accedido a  disciplinas de conjunto.

Segundo broche dorado

En los pasados Juegos de Londres 2012, Rubén Limardo se impuso ante el noruego Bartosz Piasecki con parcial de 15-10 en la final de la modalidad de espada y representó el segundo oro para el combinado tricolor en el palmarés olímpico, exterminando una racha de 44 años que no se conseguía un éxito de ese calibre.

El esgrimista de Ciudad Bolívar, séptimo ranking mundial de la Federación Internacional de Esgrima (FIE), buscará volver a escribir otra página en la historia del deporte nacional y defender su oro en Río de Janeiro 2016.

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